domingo, 25 de septiembre de 2011

Conversión Lunar

Lobo Jazario cantando a la luna,
interpretando erróneamente sus sueños
corría de estepa en estepa,
la soledad le sentaba bien
hasta que de hábito,
paso a ser martirio.
Un día,
pensó diferente,
mas por amparo,
que por fastidio,
sería esta,
quién lo arrullaría con su canto,
sería esta,
quién daría una respuesta,
sería esta,
quién aullaría.
¿Seré griego, musulmán o judío?-inquirió.

Pequeño lobezno- le dijo-
tu conversión no debe ser atada
a la palabra de los hombres;
ni la cruz,
ni la estrella,
ni mi representación,
deben posarse sobre tu frente,
ata tus intenciones a tus actos,
recorre la estepa,
busca otros como tu,
nunca les prediques;
escucha igual a los que abrazan la razón,
como aquellos a los que les convendría mas el silencio.
Y nunca busques en otros,
razones que vienen de tu boca.